martes, 29 de julio de 2008

La actividad de los cartoneros crece al compás de la pobreza

Publicó La Capital de Rosario
29 de julio de 2008



Por Lucas Ameriso

A medida que la inflación hace pedazos los ingresos de quienes menos tienen, el cirujeo aparece cada vez más como una opción para "zafar el día" y los carros de cartoneros tirados por caballos van ganando espacio en las calles de la ciudad. Un indicador al respecto es que, en los últimos meses, la Dirección de Control Urbano del municipio incautó un promedio de 50 equinos por mes, en virtud de distintas irregularidades.

En tanto, la esquina de Alvear y Brown terminó por transformarse en un improvisado estacionamiento donde los recolectores juntan sus bolsas a la espera de que un flete los pase a buscar (ver aparte).

En este marco, la convivencia de la actividad con el tránsito y los vecinos no es fácil. Ayer, una treintena de cartoneros protestaron frente a Control Urbano, en medio de acusaciones y desmentidas por supuestos pedidos de dinero por parte de agentes municipales para dejarlos trabajar en el centro.

Piquete. Los cerca de 30 carros de la cooperativa de cartoneros Empalme Graneros rodearon la esquina de Pueyrredón y Rivadavia, donde funciona Control Urbano, para exigir la entrega inmediata de 10 animales incautados en el último mes por diversas infracciones.

"Te piden 50 pesos para no sacarte el caballo y cuando te acordás, o terminás laburando para ellos o no recuperás más el animal", denunció Rubén Barrera, un cartoner0o que coincidió con otros que sin los caballos se pierden 120 pesos semanales.

Entre los reclamos que presentó la cooperativa hubo un pedido de ayuda escolar y alimentaria a la provincia, la posibilidad de trabajar con los carros en el centro y macrocentro, y la construcción de una planta de reciclado de cartón, metal y vidrio en un predio de Olivé y Gambetta, proyecto que beneficiaría a unas 350 familias.

Una comisión de cartoneros y el responsable de Control Urbano, Ariel Piñeiro, buscaron una salida conjunta al piquete. Luego de la reunión, otro de los integrantes de la cooperativa insistió con el supuesto pedido de coima para poder cirujear. "Ya denunciamos varias veces a los inspectores que pedían plata para dejarnos ir. Tampoco hay caballos maltratados ni lastimados, pero somos cirujas y nos discriminan por ser negritos", consideró Carlos Miere.

Irregularidades. En relación con estas denuncias por coimas contra inspectores, el director interino de Control Urbano salió con los botines de punta: "Que den nombre y apellido".

En cuanto al resto de los reclamos, Piñeiro señaló que los cartoneros "pidieron que se libere a los animales y plantearon que el municipio no les cobre el derecho al pastaje (5 pesos al día por animal en un predio de Ovidio Lagos al 6800). Esto se puede contemplar, pero el problema es que muchos tienen irregularidades con la documentación, la libreta sanitaria y la marca del animal", explicó.

Entre las infracciones sancionadas, muchas son por transitar en contramano con estos carros y por la conducción de los equinos a cargo de menores de 18 años, lo que "resulta inaceptable".

Golpes y palazos a un grupo de chicos en La Plata

Publicó Página/12
29 de julio de 2008

Título original: Patota policial al ataque

Una docena de niños que paran en la Plaza San Martín de La Plata fueron emboscados por un grupo organizado con palos y cadenas. ONG de la zona denuncian que uno de los atacantes dijo que buscaban “limpiar a los pibes para que dejaran de robar”.

Un grupo de 25 personas vestidas de civil y armadas con pistolas, elementos cortantes, fierros y cadenas golpearon y amenazaron a 17 chicos en situación de calle, de entre 7 y 15 años, que viven en la céntrica Plaza San Martín de la ciudad de La Plata. “Era un grupo muy bien organizado, comandado por uno de ellos, un hombre robusto que se manejaba con un handy. Fue él quien dijo que venían a limpiar a los pibes de la plaza para que dejaran de robar”, relató a PáginaI12 César Villanueva, miembro de la organización Autoconvocados por los Derechos de los Pibes de la Calle, que desde hace un mes conformaron organizaciones sociales, estudiantes y vecinos de la ciudad. Como resultado del ataque, cinco chicos recibieron fuertes golpes de fierros, palos y cadenas en la cara, en la espalda y las piernas, mientras que aún no se conoce el paradero de otros siete.

El hecho ocurrió cerca de la medianoche del viernes, cuando el grupo de civiles comenzó a actuar pocos minutos después de que la organización diera por finalizada la olla popular con la que todas las noches, y desde hace diez días, brinda un plato de comida a los chicos que viven en la glorieta de la plaza. César y tres de sus compañeros presenciaron el ataque. Fueron los últimos miembros de la organización en abandonar la esquina de las calles 7 y 53, frente a la Legislatura y la Casa de Gobierno platense. Pero no habían alcanzado a alejarse más de 100 metros de allí cuando oyeron los gritos y las corridas y regresaron a ver qué ocurría.

“Eran 25 personas que, armadas con pistolas, fierros, cadenas y navajas, aparecieron desde distintos lugares de la plaza, encerraron a los pibes y les empezaron a pegar. Algunos de ellos estaban encapuchados”, detalló César. Para él y sus compañeros, “la policía sabía lo que iba a pasar”. Su afirmación se basa, en primer lugar, en la “de- saparición repentina y sólo unos minutos antes de que apareciera el grupo violento” de los dos policías que, desde que comenzaron a realizar la olla, vigilan la zona.

Por otro lado, “la actitud que tuvo un grupo de efectivos de la fuerza pública que se encontraba a dos cuadras de la plaza, sobre la calle 50, de retener a los pibes que querían escapar” es otro detalle que impulsa a los miembros del colectivo a relacionar a esa fuerza con lo ocurrido. “Los chicos nos contaron que los retuvieron y les dijeron: ‘Ustedes roban, ahora bánquensela’”, especificó Villanueva.

Según los cálculos de Autoconvocados, son cerca de 150 los niños, niñas y jóvenes que viven en las calles de la ciudad “completamente excluidos de la sociedad, que están bastante comprometidos con las adicciones y que son acusados de robos en la zona”, explicó Sergio Raimundo, trabajador social del Comité contra la Tortura bonaerense.

Ese organismo –que funciona dentro de la órbita de la Comisión provincial por los Derechos Humanos– y la ONG se reunieron ayer con el intendente de La Plata, Pablo Briera –y harán lo propio con las autoridades provinciales– y le solicitaron “la implementación de un programa que apunte a la contención de los chicos de la calle, en donde se trabaje de manera integral con las familias para atacar a los problemas estructurales que impulsaron a esa familia a expulsar del grupo a un niño”, consideró el integrante del Comité, Roberto Cipriano García. El pedido concreto es la construcción de un hogar de día y de noche donde los chicos puedan alojarse y en donde puedan desarrollarse las políticas de contención.

“Realmente preocupa la posible relación de la policía con estos grupos, de cuyo accionar ya hemos escuchado en más de una oportunidad”, opinó García, y puso como ejemplo el secuestro y amenazas sufridas por el joven del Hogar Juan XXIII.

Por otra parte, en diálogo con PáginaI12, Villanueva también denunció a los efectivos de la Comisaría 1ª de La Plata por “cajonear la denuncia, modificarla y amenazar a algunos de los miembros de Autoconvocados durante el fin de semana”. Según señaló, en la exposición no aparece el nombre y apellido de la mujer que participó del ataque y a la que reconocieron como policía, ni la descripción física de otros tres miembros del grupo.

De los 17 chicos que fueron reprimidos, sólo 10 permanecen bajo la protección de un miembro de la organización, que los alojó en su casa. “Están aterrorizados. No quieren salir porque saben que los van a volver a agarrar”, relató César. Aún no saben el paradero de los otros siete.

Informe: Ailín Bullentini.

Corsi, fuera de circulación

Publicó Página/12
29 de julio de 2008

Se entregó un cuarto integrante del grupo acusado de pedofilia. Dos hermanos de 13 y 15 años se presentaron para declarar en el caso. La Facultad de Psicología de la UBA suspendió a Corsi en su cargo de director de la Carrera de Violencia Familiar.

El cuarto integrante del grupo de Jorge Corsi, acusado por delitos sexuales contra menores, se entregó ayer a la Justicia. Se llama Agustín López Vidal, tiene 21 años, quedó detenido y probablemente sea indagado hoy. Además, se presentó en la fiscalía la madre de dos hermanos de 15 y 13 años que podrían haber sido víctimas del grupo. Los menores declararán como testigos en los próximos días. Entretanto, en una medida que no reconoce antecedentes, la editorial Paidós decidió retirar de la circulación los cuatro libros de Corsi que tiene publicados “hasta tanto la Justicia se expida sobre la situación” del autor. La Facultad de Psicología de la UBA, por su parte, lo suspendió en el cargo de director de la Carrera de Especialización en Violencia Familiar.

Dentro del grupo, López Vidal –apodado “Pachi”– habría sido uno de los que captaban a los adolescentes en lugares públicos. Tras estar prófugo durante una semana, se presentó ayer, acompañado por su abogado, en el juzgado de instrucción interviniente, a cargo de María Fontbona de Pombo. De inmediato quedó detenido y fue trasladado a la comisaría 3ª, en Tucumán al 1500, a la espera de que, en las próximas horas, se le tome declaración indagatoria.

En cuanto a los dos hermanitos, “vieron por la tele las noticias sobre el caso y reconocieron que se trataba del grupo de hombres que habían entablado relación con ellos”, comentó una fuente judicial. A partir de eso, los chicos hablaron con su madre, que se presentó ante la fiscalía a cargo de Martín Niklison.

Los chicos, de 15 y 13 años, “son los que aparecían en las conversaciones telefónicas interceptadas a los miembros del grupo”, precisó el fiscal Niklison. “Todavía no sabemos si hubo delito con respecto a ellos –advirtió el fiscal–. Lo que sí sabemos es que estaban en relación con el grupo, en una situación parecida a la del chico que ya declaró como víctima. Se encontraban con estos hombres, iban a jugar al fútbol y a otros lugares, durante bastante tiempo. Pero podría ser que no hubieran llegado a padecer situaciones sexuales: cada chico es distinto y estos hombres no los obligaban mediante violencia abierta, sino por una violencia más sutil.”

La declaración de los menores se concretará, como indica la ley, por intermedio de una psicóloga del Cuerpo Médico Forense.

La editorial Paidós había publicado cuatro libros de Jorge Corsi: Violencia familiar. Una mirada interdisciplinaria sobre un grave problema social; Violencia masculina en la pareja. Una aproximación al diagnóstico y los métodos de intervención; Maltrato y abuso en el ámbito doméstico. Fundamentos teóricos para el estudio de la violencia en las relaciones familiares; y Psicoterapia integrativa multidimensional. Alfredo Caputo, director general de la editorial, precisó que “vamos a retirar los ejemplares de las librerías y suspender toda actividad de difusión, hasta tanto la Justicia se expida sobre la situación de Corsi. Dado que todavía no hay decisión judicial, no llegamos a una medida definitiva como sacarlos del catálogo”.

“Sería distinto si, supongamos, se tratara de libros escritos por Ricardo Barreda (el odontólogo que mató a su mujer y a sus hijas): si Paidós le hubiera publicado un libro, quizá sobre odontología, lo pensaríamos mucho antes de retirar los ejemplares. Pero en este caso, lo que agrava la situación es precisamente que el acusado era profesor en la especialidad y atendía víctimas: esto hace que toda la comunidad de la psicología esté consternada.”

Según reconoció el editor, “no conozco antecedentes en el mundo de una medida de este tipo, pero tampoco de una situación de tal particular gravedad con un autor: mirar para otro lado sería una mezquindad de nuestra parte”.

Respecto de la decisión de la Facultad de Psicología de la UBA, lleva la firma de la vicedecana, Graciela Filippi, y consiste en “suspender provisionalmente al Lic. Jorge Corsi de la dirección de la Carrera de Especialización en Violencia Familiar, del área de Posgrado, así como de todo curso perteneciente a dicha actividad, hasta tanto se esclarezcan los hechos denunciados y que se están investigando en sede judicial”. La medida se fundamenta en “la gravedad de los hechos denunciados” y en que “hasta tanto tales hechos se aclaren, resulta necesario que la comunidad universitaria tome medidas preventivas”.

lunes, 28 de julio de 2008

Secuestro de joven del Movimiento Chicos del Pueblo

Publicó la Agencia de noticias Pelota de Trapo
25 de julio de 2008

Se realizará una conferencia de prensa este lunes 28 de julio, a las 12 horas, en la Parroquia de la Santa Cruz

Por Alberto Morlachetti, Fundación Pelota de Trapo
y Luis Espósito, Hogar Juan XXII, Obra Don Orione

El jueves 24 de julio, por la mañana temprano, uno de los chicos del "Hogar Juan XXIII" de la Obra Don Orione en Gerli, fue interceptado por un automóvil en el cual iban cuatro personas armadas y con rostros tapados que lo obligaron a subirse al mismo.

Lo condujeron con rumbo incierto, amenazando a punta de pistola, que quemarían "la imprenta, la panadería y la Casa de los Niños", obras que pertenecen a la Fundación Pelota de Trapo.

Tras el recorrido por calles desconocidas, nuestro joven compañero sumamente asustado por la situación de la que fuera víctima, fue dejado en inmediaciones de la estación Remedios de Escalada, desde donde tuvo que regresar por sus propios medios.

No podemos más que relacionar lo ocurrido al trabajo diario que tanto desde la Obra Don Orione como desde la Fundación Pelota de Trapo, llevamos adelante, junto a muchas otras organizaciones.

En particular, la campaña "El Hambre es un Crimen; Ni un Pibe Menos", impulsada por nuestro Movimiento Nacional de los Chicos del Pueblo, que intenta atravesar la conciencia nacional acerca del grave problema del hambre, la pobreza y la marginalidad de la que son víctimas nuestros chicos y sus familias.

Repudiamos semejante amenaza y privación de la libertad de uno de nuestros pibes, al mismo tiempo que exigimos la acción de la justicia para esclarecer este hecho llevado a cabo por un grupo organizado, sin rostros, pero con jefes.

Para dar a conocer estos hechos y los pasos a seguir, convocamos a fundirnos en un gran abrazo en una Conferencia de Prensa a realizarse el próximo lunes 28 de julio, a las 12 hs, en la Parroquia de la Santa Cruz (Estados Unidos y Urquiza, Ciudad de Buenos Aires).

Escuelas sin jornada extendida

Publicó Clarín
26 de julio de 2008

Editorial

Con el propósito de mejorar la labor escolar, la Ley de Educación Nacional sancionada en 2006 estableció que todas las escuelas públicas del nivel primario deben brindar una jornada extendida de seis horas diarias de clase. Sin embargo, en la actualidad, sólo un porcentual pequeño de escuelas –principalmente de la Capital y de la provincia de Buenos Aires– cumple con esta obligación, presentándose una situación de inequidad en el acceso a la educación que debe ser corregida.

Casi cuatro millones y medio de chicos se ven privados del derecho a la jornada extendida, mientras que 278.457 sí tienen acceso al mismo, ya que concurren a alguna de las 2.191 escuelas que brindan una propuesta horaria acorde a la ley. Se trata del 6% de alumnos y del 9,7% de establecimientos, lo cual evidencia la necesidad de que se concreten cambios capaces de incrementar la oferta pedagógica en la totalidad de las escuelas públicas.La extensión de las horas de escolaridad debe concebirse como parte de una mejora sustantiva de la calidad de la enseñanza, lo cual es importante para revertir el deterioro educativo que se manifiesta en las evaluaciones nacionales e internacionales.

A pesar de la ley para extender la jornada educativa, un alto porcentaje de alumnos no la cumplen. Es necesario ampliar y mejorar la educación para revertir el deterioro que se refleja en indicadores locales e internacionales.

Estaba desaparecida y fue hallada por una foto en Clarín

Publicó Clarín
26 de julio de 2008

Una chica de 13 años que estaba desaparecida, fue encontrada gracias a una foto suya publicada el jueves en Clarín. Se trata de Zulma Amarilla, quien fue hallada en buenas condiciones físicas pero en estado de shock, y no se sabe aún qué le ocurrió.

Zulma vive con su madre y con varios de sus 13 hermanos en Colonia Campo Villafañe (sudeste de Formosa). Según contó a Clarín su hermana Yanina -quien trabaja en Buenos Aires-, la adolescente llegó sola a la Capital el viernes 11 de julio por la mañana, para pasar las vacaciones con sus parientes.

Iba a hospedarse en Núñez, en la casa de un hombre de 83 años, conocido de la familia, donde los fines de semana se alojaba Yanina. Zulma llamó a su mamá para avisar de su llegada. Pero horas después, el anciano telefoneó a la madre para avisarle que la chica había salido a hacer una compra y no había regresado; según su hermana, el hombre dio datos contradictorios. Ese mismo día Yanina denunció en la Policía la desaparición de la chica.

La foto de Zulma fue publicada en Clarín el jueves, a instancias de Missing Children. El mismo día, de la Dirección de Infancia, Adolescencia y Familia de la Municipalidad de Tigre se comunicaron con esa entidad para avisarles que el 15 de julio habían encontrado a "la chica de la foto" perdida, en estado de shock y en situación de calle. La adolescente fue internada en un hogar, y de inmediato atendida por psicólogos. Parte del relato que contó era verdadero, pero también dio datos que no son reales. Al día siguiente se escapó.

Lidia Grichener, presidenta de Missing Children, contó a Clarín que sugirió a los familiares de Zulma pegar afiches con su foto en las estaciones de trenes entre Tigre y Martínez. El jueves a la noche, en la estación de Tigre, la vieron bajar de un tren. "Estaba shockeada y sólo reconoció a mi mamá; a mí no me reconoció", contó Yanina.

Fue llevada al Hospital de Tigre, donde la revisaron. Según la hermana, sólo tendría un golpe en una mano. "No sé qué pasó; habló a solas con mi mamá, y ella no nos contó nada", agregó.

"La Justicia sigue sin estar conectada: fue una casualidad que alguien viera la foto en el diario, y que justo vieran a Zulma bajar del tren", apuntó Grichener.

"No hay una adecuada centralización de la información", admitió Marta Pesenti, coordinadora del Registro Nacional de Información de Personas Menores Extraviadas, que depende del Ministerio de Justicia. "Por ley de 2003 tiene por función el entrecruzamiento de datos -comentó Pesenti, quien asumió en mayo-. A veces se crean los organismos sin los recursos humanos y materiales suficientes. Con algunas provincias articulamos, pero de manera artesanal".

El sitio www2.jus.gov.ar/chicos tiene falencias, que Pesenti espera resolver en parte en un mes, con un nuevo sistema informático. "Aspiramos a poder ofrecerlo a las provincias y capacitar al personal, para comenzar a trabajar de manera articulada y ordenada -señaló-. Ahora estamos trabajando en total anarquía, con funcionarios que se quedan con información valiosísima, y otros que desconocen la existencia de este servicio".

La banda de los "boylovers"

Publicó Clarín - Suplemento Zona
27 de julio de 2008

Captaba a chicos en locales de comida rápida, plazas y cibercafés. Clarín tuvo acceso al corazón de la investigación, donde se menciona a Jorge Corsi, uno de los psicólogos más reconocidos del país.

Por Claudio Savoia (csavoia@clarin.com)

La voz suave, casi susurrada, llega como un hilo de miel a través del teléfono: "Hola, mi amor, ¿cómo te sentís? ¿Te fue bien en el examen que tenías hoy?" Geo habla sin temor, y casi no se detiene a escuchar la respuesta. "Mirá que yo me preocupo por vos, no te olvides que sos muy importante para mí". Claro, tiene todo controlado: el celular con el que su víctima lo escucha se lo trajo él desde España, y sabe exactamente cuántos minutos de crédito quedan en la última tarjeta telefónica que le regaló. Ahora hay que arreglar la cita para el sábado, a ver fútbol con Mache, Augus y sus amigos; charlar de "nuestras cosas" y, después de seducirlo hasta arrancarle un beso, pasar un rato juntos en el cuarto, frente a la cámara web. Total, el lunes todo habrá pasado: el dulce Geo cederá su identidad a un hombre intachable. De apariencia intachable. La policía corporiza las sospechas de esa transformación en el prestigioso psicólogo Jorge Corsi.

En esa misma línea de presunción, Mache volverá a ser Marcelo Rocca Clement y, Augus, Augusto Correa.

Juntos son los "Boyslovers", una banda de abusadores sexuales de adolescentes, descriptos con ese nivel de detalles en una investigación aún en marcha, que apunta a personajes cuya inocencia fue puesta en duda.

Acercamiento, complicidad, seducción, intimidad, lujuria, dependencia. O dicho de otro modo: emboscada, engaño, explotación, sometimiento. Con pequeñas variaciones la lóbrega rutina se repitió durante años, "no menos de cinco", durante los cuales cada paso fue perfeccionándose. La jugada maestra: haber incorporado a un psicólogo, un experto conocedor de las debilidades, ilusiones y necesidades de los chicos y adolescentes que serían seleccionados y conducidos hasta él para ser abusados. "El era el gurú del grupo, el líder, el que manejaba los tiempos y contenía a los chicos cuando a los otros se les iban las cosas de las manos", dice a Clarín una de las personas que tuvo acceso a las profusas escuchas telefónicas que alimentan el expediente. "Las pruebas contra los detenidos son contundentes", asegura.

El último tramo de la historia comenzó a escribirse el miércoles pasado a las 4 de la mañana, cuando una docena de policías de la división Delitos contra menores de la Policía Federal concretaron los allanamientos ordenados por la jueza María Fontbona de Pombo. Un patrullero estacionó sobre la calle Paraguay al 3400, y sus pasajeros tocaron un timbre del octavo piso. A los pocos minutos, Corsi abrió la puerta: sorprendido, despeinado, el cuerpo cubierto con una bata. Escuchó la acusación y durante toda la mañana ni siquiera aceptó un vaso de agua. Tampoco usó el teléfono para llamar a un abogado, o a esa amiga, "la única" con la que compartía chismes y naderías durante largas charlas telefónicas. Nada. Su mente, en cambio, parecía volar muy lejos.

Quizás escudriñaba el pasado buscando el día, el momento justo en que Geo creció lo suficiente dentro de él como para despegarse y cobrar vida propia, negando con sus actos las palabras que Jorge, su contracara luminosa, de acuerdo con la investigación, enseñaba en mil aulas y bibliotecas. Vida propia, y también modales, un léxico y hasta un timbre de voz diferentes al del adusto psicólogo. "Es increíble, realmente se convertía en otra persona", certifican dos fuentes judiciales.

Voló la mente de Corsi en aquella mañana helada en la que Jorge y Geo, de golpe, volvieron a reunirse bajo su piel, mientras los policías llenaban papeles y celebraban el éxito de los operativos frente a él. Quizá repasó sus viajes a España, a Puerto Rico y a República Dominicana, lugares en los que Corsi daba alguna conferencia mientras Geo mantenía reuniones y contactos, intercambiaba cosas, anotaba direcciones y teléfonos. Esos viajes que el fiscal Martín Niklison tiene en la mira, y esas reuniones que en España atrajeron sobre él la mirada de los policías especializados en pedofilia, a tal punto que cada vez que aterrizaba en Barajas un discreto agente lo vigilaba (ver página 32).

"Los viajes eran la gran pantalla del psicólogo", confirman al unísono otros dos funcionarios. "Quién iba a sospechar de lo que hacía en el exterior. Pero en España se contactó con pedófilos conocidos y vigilados, y entonces comenzaron a controlarlo a él".

En la frialdad de una celda de un departamento policial de Villa Lugano, hoy Corsi quizá recuerde y retroceda mil veces hasta encontrar dónde se perdió. ¿Cuándo lo conoció a Marcelo Rocca Clement? ¿Y a Augusto Correa? ¿De quién fue la idea de integrarlo a los Boyslovers, esa ciber firma a través de la cual intercambiaban datos y fotos con otros hombres de todo el mundo, a pesar de que ya había sido descubierta por la policía hacía ocho años? Quién sabe. "Acá -explican- el seguro era Jorge, el gran profesor Jorge Corsi". El que se había codeado con todos los fun cionarios para enseñarles cómo detectar y asistir a los chicos golpeados o abusados, el que casi todas las semanas se comunicaba con la funcionaria y especialista Eva Giberti en charlas habituales y respetuosas, que alguna vez habrían incluído una invitación para conocer a un ministro, dijeron las fuentes. Nada tenía de extraño, después de todo. Si todos querían escuchar a Jorge Corsi, el autor de libros y artículos sembrados por el mundo, el conferencista magistral que todos querían en su mesa.

Pero hay algo que quizá la mente de Jorge Corsi esquive, anclada en sí misma: en la cara de ese pibe que anteayer vio su foto por televisión, y entre lágrimas le contó todo a su mamá, y junto a ella volvió a contarlo todo en una dependencia policial, y mañana o pasado volverá a hacerlo frente a la jueza. Y probablemente su memoria también evada la cara de los padres que en estos días se están enterando por policías y funcionarios judiciales que su hijo era abusado por ese amigo mayor que tan amablemente venía a buscarlo a casa y que tanta confianza les inspiraba, aquel profesor de música que también los ayudaba en inglés.

Ante la Justicia, sorprendidos, esos padres escucharán paso a paso cómo se construyó el infierno para sus hijos. Y escucharán lo siguiente: "Rocca Clement es el gran reclutador, capaz de detectar en el acto cuál de todos los pibes que invitó a jugar al fútbol podrá convertirse en su víctima", explica uno de los principales investigadores del caso. "El le enseñaba a los demás a engañar a los chicos, a buscarlos en las plazas y cibers, a establecer contacto con ellos en los fotologs con que los adolescentes, muchas veces a espaldas de sus padres, se presentan y se muestran por Internet. Entonces llegaban los regalos "si el pibe no tenía plata" o los consejos y la compañía, con chicos de dinero pero soslayados por sus padres. "Cuando el adolescente ya había sido captado por los engaños y lisonjas de Rocca Clement, Augusto Correa o algún otro miembro de los Boyslovers, lo invitaban a ver fútbol o películas a lo de Corsi, generalmente los sábados. Comenzaban las preguntas íntimas, los besuqueos y toqueteos entre los abusadores, la invitación a los pibes a pasar al cuarto", puntualizaron los investigadores. Todo con cuidado, con el cariño que -según los expertos- excita tanto a los abusadores como el poder y la violencia a los violadores.

La historia de Marcelo Rocca Clement hoy de 34 años es breve y estremecedora. Ex profesor de música en varios colegios de zona norte, "entre ellos uno de los establecimientos católicos más tradicionales de Recoleta" fue denunciado por abuso de chicos en el año 2000. Una catarata de pruebas y testimonios lo mandó a la cárcel; la desidia judicial y quizás el consejo de un abogado lo sacaron de ella después de dos años en los que estuvo preso sin haber sido enjuiciado. Un antecedente que impidió volver a encerrarlo, aun cuando las pruebas de sus abusos eran concluyentes.

Clarín accedió al auto de procesamiento "sin prisión preventiva" de Rocca Clement, firmado en diciembre de 2005. Allí se lo consideraba "autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal, tentativa de abuso reiterada en al menos dos ocasiones, abuso sexual gravemente ultrajante y abuso sexual reiterado en al menos tres oportunidades, y corrupción de un menor de edad". Basado en escuchas telefónicas que incluían detalles sexuales impresionantes, el juez dio por probado que Rocca Clement había compartido un viaje a Mar del Plata con un niño de 12 años, durante el cual había abusado de él de distintos modos. La investigación, admitía el juez, había comenzado el 1 de diciembre de 1999, cuando la división española de Interpol detuvo a un pedófilo a quien le secuestró una lista de correos electrónicos en los que se pedía el envío de pornografía infantil. Dos de esos mensajes provenían de Buenos Aires. ¿Su autor? "Albatros Boylover". O Marcelo Rocca Clement.

Otro de los detenidos del miércoles, Augusto Correa, era profesor de educación física y trabajaba en una pileta del Parque Sarmiento. Y hay más detalles escabrosos. Una de aquellas víctimas, que ahora tiene 20 años, colaboraba con Rocca Clement en el reclutamiento de otros preadolescentes que serían víctimas del abuso. El círculo se cierra. En Tribunales aseguran que la jueza vino siguiendo personalmente y con máximo compromiso la investigación. "Se llevaba a su casa los casetes con las escuchas telefónicas, hacía anotaciones de todo, seguía el caso al minuto. Y sólo ordenó las detenciones cuando se acumularon pruebas contundentes", explican. Y recuerdan que todavía hay un prófugo, y aseguran que en los próximos días habrá más detenciones y sorpresas, y reconocen que hasta ahora los chicos damnificados son ocho, "pero habrá que ver al final de la investigación". En los depósitos judiciales hay una docena de computadoras y veinte teléfonos celulares "de los cuales Corsi tenía cinco" que todavía no fueron analizados por los peritos. Y todavía pueden sumarse los testimonios de más víctimas, como la que el viernes dijo reconocer a Corsi por TV.

"Los estudios concernientes a los perpetradores de abuso y maltrato describen al abusador típico como alguien que no tiene nada que ver con los estereotipos habituales que circulan por el imaginario colectivo. Esto se debe al fenómeno de doble fachada: existe un desdoblamiento entre la imagen social y la imagen privada". La certera descripción pertenece a un especialista, el psicólogo Jorge Corsi. Y le calza como un guante a su presunto Mister Hyde, el edulcorado Geo de Palermo. Pero esta historia no acaba con ellos. La psicóloga y sexóloga Adriana Arias levanta la voz: "Pensando en el horror de esta noticia no quiero ni debo dejar de subrayar que todos los días, en diferentes núcleos sociales, en multiplicidad de formatos vinculares, el abuso se comete y se padece sin la atención que la sociedad debería adjudicarle. Y que es mentira, y una defensa social escasa y cobarde, reducirlo a uno de los tantos sufrimientos de la clase pobre. Este caso revela que la situación abusiva no está lejos de nosotros, que la perversión circula con éticas y estéticas no tan distantes y desconocidas".

"Si alguien se llevó a mi hija, le pido que me la devuelva: no puedo más"

Publicó Clarín
26 de julio de 2008

Entrevista con la madre de Johana, la nena de 12 años que desapareció el miércoles de la semana pasada.

Los últimos mimos se los dieron mientras veían Kung Fu Panda. La familia estaba acostada en la cama grande frente al televisor. Johana, de 12, reía mostrando la lengua porque su hermano mayor, Miguel, de 14, tiraba patadas al aire y simulaba ser el personaje de la película animada. La mamá, Isabel, abrazaba al más pequeño, Armando, de 5, que se había dormido. Cenaron sobre las sábanas y se quedaron hasta las dos. Fue la noche del martes de la semana pasada. Al otro día, luego de un beso de despedida antes de ir a la escuela, Johana desapareció de la faz de la Tierra. Aún no aparece, y su madre hoy desespera.

Isabel Gainza vive en Pompeya desde que llegó de Jujuy, a los 17. Se enamoró y tuvo tres hijos. Y hoy, con 35 años, sólo puede abrazar a dos. Johana no está. Y esa es la causa por la que no ha dormido en la última semana. Se le nota en la cara hinchada y en las ojeras largas. Está quebrada. Teme lo peor, y aunque no se anima a pensarlo mucho, lo dice entre lágrimas y silencios. Sentada en un café del Centro, ruega: "Si alguien se la llevó, no sé con qué intención, le pido que me devuelva a mi hija. Es una tortura diaria. Llega la noche y no sé si comió, si tiene frío, si está bien".

La mamá está convencida de que no se fue sola, "jamás lo haría". Dice que entre ellas hablaban mucho, que se tenían confianza y que si hubiera tenido un problema se lo hubiera dicho. "Nos decimos que nos amamos todo el día, aunque estén los amigos", dice. Incluso, su hija le mostraba las cartas de sus compañeras. "Le escriben que es una 're amiga', que la 're quieren'". Así que tampoco desconfía de su entorno. "No conoce nada más que lo que la rodea. Y eso es bueno: sólo salía de la casa para ir a la escuela o a los Scouts. Nunca fue a otra provincia, siquiera".

Desapareció, justo, en el trayecto de la casa a la escuela. Su hermano Miguel la vio por última vez cuando subió al colectivo en Centenera y Cruz, y ella quedó esperando al 42 para ir al Normal N°4 de Caballito. "¿Cómo puede ser que nadie haya visto algo?", se pregunta. Y ella misma ofrece una respuesta: "La gente tiene miedo de hablar. Piensan que los van a perseguir.¡Despierten por favor! No pedimos su nombre, dirección, ni nada. Sólo que llamen al 102 y den los datos que tengan. Necesito que me ayuden. No tengan miedo. No puedo más. Se me cruzan muchas cosas malas por la cabeza".

Hay pocas pistas sobre su paradero. Entre los llamados al 102 los investigadores destacaron tres: el de una mujer que dijo haber visto una chica parecida por Belgrano; otros, que la vieron por la autopista 25 de Mayo, y un tercero que preocupó especialmente porque afirmaba que una niña con los rasgos de Johana preguntó, en Provincia, cómo tomar un tren a Quilmes. "Por más que no sea ella, es una nena que está sola. Mi caso no es el único. Tienen que encontrarlos a todos. Puede pasarle a cualquiera. Uno piensa que está cuidando bien a sus hijos y te los arrebatan".

INFORME MAESTRIA CLARIN

Chaco implora por agua mientras se inaugura un aeropuerto

Publicó Diario Hoy de La Plata
28 de julio de 2008

Título original: Vuelos internacionales a la tierra resquebrajada

El interior chaqueño lleva 9 meses sin lluvias importantes. La agricultura está en jaque y el ganado agoniza. Los pobladores se las arreglan como pueden: algunos compran bidones, pero otros deben conformarse con lo que reparten los municipios. Promesas de obras hubo, pero se quedaron en eso. El gobernador, Jorge Capitanich, acaba de inaugurar un aeropuerto internacional

Aunque suene antipático, en la Argentina K suceden ciertas escenas que ni Lewis Carroll hubiese podido imaginar para su Alicia en el país de las maravillas. Una de ellas se vivió hace alrededor de diez días, cuando la presidenta Cristina Fernández reinauguró, junto con el gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, el aeropuerto de Resistencia al que se le asignó carácter de internacional. El mandatario ultrakirchnerista presentó dicha obra como parte del “más extraordinario plan de infraestructura que la provincia y la región recuerden en su historia”.
Importante, es cierto. Pero no era lo que necesitan (y esperan) los habitantes y productores del interior provincial. Entre otras cosas, porque en parajes como Almirante Brown y Pampa del Infierno -que le hace honor como nunca a su nombre- no miran hacia el exterior, sino hacia la administración central. Es que llevan 9 meses sin lluvias importantes y el suelo se resquebraja al ritmo de la sequía. Los cultivos piden agua, y el ganado agoniza y muere.
El cielo se hace esperar, y no hay obras que vengan a suplir la ausencia de nubes.
La provincia tiene una superficie de 99.633 km2. Hoy en día, el 70% de esa extensión -unos 69.743 km2- sufre los despiadados azotes de una devastadora sequía que se podría haber afrontado de otra manera. Encima, desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) llegan noticias desalentadoras: al menos por el momento, no hay indicios de lluvias, por lo que hay lugareños que se animan a vaticinar “una seca hasta octubre”.
Funcionarios y productores del sudoeste chaqueño alertaron que esta adversidad ya dejó sin agua potable a las 300 mil personas que habitan en esa región, y advirtieron que la escasez comenzó a afectar la agricultura.
“Se vive un panorama crítico y de gran preocupación, porque de seguir así las fuentes de abastecimiento de agua entrarán en riesgo de agotamiento”, observa Pedro Favaron, presidente de la Administración Provincial del Agua (APA) del Chaco, organismo encargado de tomar las medidas necesarias para paliar la falta del recurso vital.
Desde la humedad pampeana es difícil imaginar una existencia en la que cada gota de agua representa un pequeño tesoro. Pero en los pueblos chaqueños se repiten postales que no remiten a la ficción, sino al drama. Veamos: camiones cisternas que son enviados por los municipios y largas filas de vecinos que pugnan por algo de líquido para cargar en sus bidones.
Está claro que las prioridades son la ingesta y la cocina, y lo que queda es para higiene personal. Llegado el caso, lavar un auto o regar las plantas adquieren la proporción de un despropósito.
En la APA aseguran que se distribuyen entre 500 y 700 mil litros de agua por semana para las 300 mil personas que padecen la sequía. Y, mientras el líquido también se traslada en trenes, los funcionarios impulsan un plan de perforaciones que ya debería haberse aplicado: buscar en napas subterráneas.
Elemental, podría decirse. Sin embargo, los resultados de las excavaciones no son alentadores. “Para obtener agua buena tendríamos que excavar a unos 400 o 500 metros, ya que en las napas superiores el agua está cada vez más salada. Peor aún, en muchos casos contiene arsénico y es lisa y llanamente inutilizable”, se lamenta Favaron.
En ciudades como Charata, una de las más ricas del interior chaqueño, compran agua en botellones y realizan las tareas rutinarias con el líquido que llega en el camión. No haga cuentas: una familia tipo invierte unos $ 500 mensuales sólo para beber y cocinar. Cada botellón ronda los $ 12 y un camión de agua dura (no potable) cotiza entre $ 50 y $ 90, según el nivel de impurezas.
Algo se cae de maduro: este sistema no está al alcance de aquellos que apenas tienen recursos para llegar a fin de mes, y el Chaco no es una provincia rica, si lo que se mide es el poder adquisitivo de sus habitantes.

“Cada vez que se desata una crisis así, toda medida parece insuficiente”, dice Angel Rozas, ex gobernador de la provincia, y agrega que las soluciones existen “pero no aparecen”.
La lluvia es una bendición, y la seca, una maldición que se extiende. En ese sentido, el presidente de la Sociedad Rural chaqueña, Enrique Santos, apunta que los padecimientos se agravaron debido a la existencia de canales submeridionales que se realizaron en la frontera con Santa Fe (en el extremo sur) para evitar inundaciones: “Eso termina llevándose las pocas gotas que caen”.
Favaron considera que las grandes sequías son producto de 16 años de inacción. Dicho de otro modo, de gestiones que no fueron capaces de diseñar un plan hídrico que previniera lo que hoy ocurre.

En una suerte de alegato, Rozas refuta que su proyecto del “gran acueducto del norte” solucionaría el problema, pero Capitanich “lo dejó fuera de agenda”.
“Este proyecto solucionaría el 75% de los problemas que atañen al agua para consumo”, afirma Rozas, y añade que durante su gestión se aprobó una ley nacional que otorgaba 150 millones de dólares para esta obra. “Luego vino la gran caída de 2001 y se suspendió todo. Después llegó la reactivación y la promesa de (Néstor) Kirchner”, pero el proyecto descansa en un cajón.
Los expertos estiman que se necesitan 150 kilómetros de obras para llevar el líquido a la zona crítica, ésa en la que se consume agua de pozo que rara vez alcanza los estándares básicos de potabilidad.

Favaron considera que para realizar las obras que pongan fin a esta situación se necesita una inversión de $ 1.900 millones, y explica que lo más adecuado sería desarrollar una infraestructura que permita llevar los excesos de ciertas zonas hacia los lugares en los que sólo abunda la escasez.

Mientras tanto, la gente de a pie mira hacia el cielo como implorando que la lluvia empape la tierra ajada y salve al ganado de una muerte segura. Hoy, el Chaco es tierra de vacas flacas. Eso sí, tiene un estupendo aeropuerto en Resistencia, su capital.

$ 50 millones en perdidas. Tierra de vacas flacas

Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), la población del Chaco es de 907.389 habitantes. Poco menos de la mitad, para ser precisos el 40%, reside en zonas rurales y tiene su principal fuente de ingresos en el campo y su actividad agropecuaria.
Dos de los lugares más afectados por la sequía son Fontana y Santa María de Oro, donde hay más de dos mil productores. Entre ambos departamentos las pérdidas ganaderas superan los 50 millones de pesos, entre la mortandad, la pérdida de peso, el atraso de parición y las malas ventas. Todo se suma -en rigor de verdad resta- a los gastos de traslado y transporte de animales hacia otros lugares en los que tienen mayores posibilidades de sobrevivir.
Se estima que entre 60 mil y 70 mil cabezas de ganado no han podido salir y que la agricultura ya perdió $ 30 millones a raíz de la sequía.
El presidente de la Sociedad Rural chaqueña, Enrique Santos, asegura que es desalentador ver las hectáreas “sin agua, ni pasto” como si se tratara de tierra arrasada. Considera que, en parte, “esto es una consecuencia de los desaciertos del Gobierno nacional”.

De la inundación a la sequía, en el país de los contrastes

Cuando todavía no se disiparon las crueles imágenes de las últimas inundaciones, el Chaco sufre otras que son diametralmente opuestas y muestran a la tierra ajada y polvorienta que implora por un trago de agua.

Pedro Favaron, presidente de la Administración Provincial del Agua (APA), no deja de asombrarse ante esta hiriente paradoja. Para colmo de males, la sequía ya desencadenó los primeros incendios y afectó unas 20 mil hectáreas en el oeste chaqueño.
“Lugares que estuvieron llenos de agua hoy sufren la sequía porque la vegetación perdió prácticamente toda la humedad”, se lamenta Favaron. Es que a la preocupación por la falta de lluvias se suma la que genera el fuego, sobre todo en la zona de El Impenetrable, donde los pastos secos se convierten en un material altamente combustible, algo así como alimento para las llamas.

Sistema médico argentino: déficit de 90 mil enfermeras

Publicó Crítica Digital
27 de julio de 2008

Hay un auxiliar sanitario cada cuatro médicos. En la Ciudad hay "6 mil cargos sin cubrir y se necesitan 4 mil en los hospitales bonaerenses".

El sistema de atención médica en la Argentina tiene un déficit que supera las 90 mil enfermeras, y se estima que hay sólo una cada cuatro médicos, según reveló hoy un informe preliminar realizado por la Universidad de Buenos Aires (UBA) a raíz del XI Congreso Argentino de Salud que se realizará en septiembre próximo en la ciudad de Salta.

En el país, hay un auxiliar sanitario cada cuatro médicos, según informes de la carrera de Enfermería de la UBA, cuando el Banco Mundial recomienda una proporción inversa.

"Desarrollar la profesión de la enfermería, tanto para hombres como para mujeres, es una de las claves de cualquier modelo exitoso de atención de la salud", remarcó la casa de estudios, según un comunicado difundido hoy por la Asociación Civil de Actividades Médicas Integradas (ACAMI).

"Sólo 1.000 licenciados en enfermería egresan por año, cada uno de los cuales obtiene en promedio 1.500 pesos, y alrededor de 5.000 médicos se suman anualmente al mercado de trabajo", destacó la Universidad. La situación de la enfermería en el país será uno de los temas centrales del próximo Congreso Argentino de Salud definido por la ACAMI como "el foro sanitario más importante del año".

La Universidad también especificó que hay "83 mil profesionales" en la Argentina, mientras Capital Federal "tiene 6 mil cargos sin cubrir y se necesitan 4 mil en los hospitales bonaerenses", según datos del Observatorio de Recursos Humanos de la provincia de Buenos Aires consignados en un comunicado.

La Federación de Trabajadores de la Sanidad (FATSA) coincidió con la UBA al sostener que "el déficit de enfermeros que existe en el país es una de las principales debilidades del esquema sanitario, ya que faltan 90 mil profesionales" y agregó que en el país, el 85% del personal de enfermería está compuesto por mujeres.

Por su parte, el presidente de ACAMI, Marcelo Mastrángelo, confirmó que la Argentina "es el segundo país con más médicos por habitante, detrás de Italia" y agregó que hay "más de 170 mil médicos matriculados, pero carecemos de la cantidad necesaria de enfermeras".

ACAMI está integrada por el Centro de Educación Medica e Investigaciones Clínicas Norberto Quirno (CEMIC), la Fundación para la Lucha contra las Enfermedades Neurológicas de la Infancia (FLENI) y la Organización de Servicios Directos Empresarios (OSDE), entre otras instituciones sanitarias.

Peligra el inicio de clases

Publicó Crítica Digital
27 de julio de 2008

Por reclamos salariales, este lunes no habría clases en Tucumán, Entre Ríos, Salta y Río Negro. En Bs. As. ya advierten sobre un paro.

Desde mañana y hasta el 8 de agosto, más de cinco millones de alumnos de todos los niveles educativos de 21.224 establecimientos ubicados en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires comenzarán sus vacaciones de invierno.

Al mismo tiempo, deberán volver a las aulas los estudiantes de Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Mendoza, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, Santa Cruz, San Luis, Santa Fe, Santiago del Estero, Tucumán y Tierra del Fuego.

Sin embargo, algunos sindicatos docentes advirtieron que peligra el reinicio de clases en Tucumán, Entre Ríos, Salta, Río Negro y en Buenos Aires, tras el receso invernal.

En Salta, los docentes iniciarán mañana una huelga que se extenderá toda la semana. El viernes realizarán una marcha para reclamarle al gobernador Juan Manuel Urtubey un salario básico de 1.800 pesos.

En Entre Ríos, los educadores realizarán mañana un paro de 72 horas. Advirtieron que las protestas continuarían si el gobernador Sergio Urribarri no realiza una nueva propuesta salarial.

En Río Negro, los docentes prevén realizar el viernes la primera de las tres jornadas de paro decretadas para reclamar un aumento salarial. Los maestros agrupados en el gremio UNTER exigen un haber mínimo inicial de 2.000 pesos mensuales. La realización de medidas de fuerza, que se complementarán el 5 y 6 de agosto, provocaron que el Ministerio de Educación provincial suspenda las negociaciones paritarias.

En Tucumán, los gremios docentes anticiparon que si no reciben una propuesta satisfactoria para elevar los haberes mínimos a 1.500 pesos realizarán paros y marchas.

En Buenos Aires, la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) y la Unión Docentes Argentinos (UDA) aprobaron en congresos gremiales "no retomar" las clases el 11 de agosto si antes el gobierno de Daniel Scioli no convoca a la paritaria del sector docente.

Mirta Petrocini, titular de la FEB, que reúne a 60 mil docentes bonaerenses, anunció que la huelga está condicionada a que el gobierno "presente cuanto antes una propuesta salarial acorde con el incremento real del costo de vida y retroactivo al 1° de julio de este año".

La dirigente también reclamó que se discuta un porcentaje "similar al otorgado en marzo", que fue cercano al 24%, y que eleven los 1.290 pesos que cobra un maestro que se inicia en la carrera.

En otro orden, los docentes pampeanos volverán mañana a clases pero cuestionaron el proyecto oficial que pretende modificar la Ley Provincial de Educación, una situación que podría derivar en un conflicto en las próximas semanas.

Varias provincias retoman las clases con conflictos salariales

Publicó Página/12
27 de julio de 2008

Docentes de Entre Ríos y Salta iniciarán mañana un paro en reclamo de mejoras salariales, los maestros de Río Negro harán huelga el viernes, mientras en Tucumán y La Pampa los gremios del sector comenzarán a discutir nuevos aumentos con las autoridades.

En Salta, el reclamo de un salario básico de 1.800 pesos, sumado a una disputa interna gremial, llevó a los docentes a iniciar una huelga que se extenderá toda la semana e impedirá el reinicio del ciclo escolar tras el receso de invierno.

Luego de una asamblea, los maestros "autoconvocados" resolvieron ayer lanzar la medida de fuerza hasta el viernes, día en que marcharán para exigir al gobernador Juan Manuel Urtubey una mejora en los salarios.

La determinación coincidió con una serie de discrepancias gremiales, debido a que una parte del sindicato docente aceptó la propuesta oficial que eleva el haber básico a 1.200 pesos.

Molestos por esta situación de los sindicalistas "que se sentaron en una mesa de diálogo sin el respaldo de las bases", los maestros salteños anunciaron la medida de fuerza, informaron fuentes del gremio.

En Entre Ríos, los educadores resolvieron realizar desde mañana un paro de 72 horas y postergar el reinicio de las clases hasta el jueves.

La medida fue decidida por la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER), que agrupa maestros de las escuelas públicas, a los que se sumaron los docentes privados afiliados a SADOP y la Unión Docentes Argentinos (UDA).

Las protestas continuarían si el gobernador Sergio Urribarri no realiza una nueva propuesta salarial, dijeron voceros gremiales.

En Río Negro, el reinicio de las clases será irregular porque los docentes prevén realizar el viernes la primera de las tres jornadas de paro decretadas para reclamar un aumento salarial.

Los maestros agrupados en el gremio UNTER exigieron que el haber mínimo inicial llegue a 2.000 pesos mensuales.

La realización de medidas de fuerza, que se complementarán el 5 y 6 de agosto, provocaron que el Ministerio de Educación de esa provincia suspenda las negociaciones paritarias.

Por su parte, si bien las clases se reiniciarán mañana sin problemas, los maestros de Tucumán volverán a reclamar esta semana un aumento salarial durante una negociación que mantendrán con el gobierno provincial.

La Unión de Docentes Tucumanos y el Sindicato Argentino de Docentes Particulares advirtieron que si no reciben una respuesta satisfactoria para elevar los haberes mínimos a 1.500 pesos decidirían esta semana paros y marchas.

En otro orden, los docentes pampeanos volverán mañana a clases pero cuestionaron el proyecto oficial que pretende modificar la Ley Provincial de Educación, una situación que podría derivar en un conflicto en las próximas semanas.

Funcionarios y maestros se reunirán durante la semana para profundizar el estudio de la iniciativa que, entre otros puntos, prevé volver a un primario que tendrá seis grados y un secundario obligatorio de otros seis, con una fuerte inclinación hacia la educación técnica.

Por último, las clases comenzarán mañana sin problemas en Corrientes, informaron las autoridades educativas.

Tedesco: “Vamos a debatir una nueva escuela secundaria”

Pulicó Página/12
28 de julio de 2008

Mientras busca iniciar una reforma de la escuela media, Tedesco dice que la prioridad es mejorar la calidad educativa y bajar la deserción. Aspira a que este año se consensúe una ley universitaria.

Por Nora Veiras

El eterno conflicto con los ruralistas se calmó y el ministro de Educación, Juan Carlos Tedesco, espera que los medios renueven la agenda para que los temas de su cartera ocupen un lugar. Dice que la calidad educativa es una de las prioridades. El desafío es alcanzarla al tiempo que trata de que 6 millones de personas de entre 15 y 45 años terminen el secundario y que unos 90 mil adolescentes que año a año dejan colgadas materias en el último tramo de la escuela media se reciban. Confía en que la nueva Ley de Educación Superior sea sancionada este año “con máximo consenso” y advierte que la paritaria nacional “no tiene en agenda” un aumento salarial. Como pedagogo, uno de los ministros no peronistas del gabinete de CFK dice que uno de los nuevos desafíos de la escuela es la relación de los jóvenes con el uso de las tecnologías para propagar sus propios actos de indisciplina. Anuncia que este semestre se destinará a debatir la transformación del secundario.

–Estos meses de gestión estuvieron signados por el conflicto rural. Como miembro del gabinete nacional y como pedagogo, ¿qué lección aprendió?

–No soy yo el más indicado para analizar el conflicto con el campo desde su especificidad, aunque obviamente deja enseñanzas a todo el mundo. Quizá lo más impactante es cómo todos los problemas de la agenda educativa no fueron considerados públicamente. Estos meses hemos hecho muchas cosas importantes que no han tenido ninguna atención o muy poca: se aprobaron los lineamientos nacionales de la educación sexual, se lanzó el Plan Fines (de finalización de escuela secundaria para jóvenes y adultos), la licitación para la construcción de 150 escuelas, el programa de mejoramiento de enseñanza de las ciencias, el plan de lectura, y puedo seguir. La única noticia de educación que aparecía cada vez que el conflicto del campo disminuía era el tema de la violencia en las escuelas. La verdad que es difícil gestionar con una construcción de opinión pública y de comunicación de esas características. Dicho esto, el conflicto del campo deja también como aprendizaje de adultos esta idea de que es posible cortar rutas sin que nadie sea sancionado, que se discute muchas veces sin conocimiento. En sentido positivo hemos visto un muy buen debate en el Congreso como hacía años no se veía, eso también es educación ciudadana. También es importante advertir que hoy los conflictos sobre los que un ciudadano tiene que participar y decidir exigen muy buen manejo de conocimientos científicos, técnicos y valores éticos: el tema medioambiental, el conflicto en el campo, los temas de la salud, están demandando a la ciudadanía mayores niveles de reflexión, capacidad de análisis, es muy bueno como experiencia.

–¿El rol del Ministerio de Educación debe estar contemplado en una nueva Ley de Radiodifusión?

–Sí, lo estuvo siempre. Me parece que el tema de la ley será tratado como corresponde. Lo que me preocupa es el papel de los medios en los procesos educativos de la población. En ese aspecto tenemos que actuar proactivamente, por eso el canal Encuentro, por eso el programa de Escuela y Medios. Son acciones del Ministerio de Educación que muestran que es posible hacer una televisión pública educativa de muy buena calidad y que es posible educar a los alumnos en el uso de los medios. Lo que necesitamos con respecto a los medios es tener una demanda más calificada, una población que demande información y televisión de mejor calidad, que no se someta pasivamente a la manipulación que pueda haber del lado de los medios.

–En cuanto a los temas de violencia, resulta novedoso que a los chicos les interese la difusión de la indisciplina a pesar de la sanción que puedan recibir...

–Primero, es un fenómeno inédito y propio de esta época de uso, expansión y renovación de los medios de comunicación, unidos a las tecnologías de la información. Antes, cuando un chico cometía alguna falta no quería que se enterara nadie, ahora más bien la comete para que todo el mundo se entere. Los chicos están probando cuándo les ponen el límite y la verdad es que esto indica que hay muchos límites que empiezan a ser sobrepasados y que se debería intervenir más prematuramente. El otro tema es el papel de los medios en la cultura juvenil, que es un hecho nuevo, que debe ser estudiado, analizado. Es un hecho mundial, no es un problema argentino. Uno de los últimos números de Le Nouvel Observateur está dedicado a incidentes de este tipo en Francia. Tenemos que ver cómo el medio pasa a ser parte del problema. Esto afecta también la responsabilidad que los medios tienen que tener: si un chico filma y lo cuelga en Internet y el medio lo difunde, estamos haciéndole el juego a la indisciplina que el chico plantea. Es un fenómeno nuevo que interpela nuestro conocimiento profesional, técnico, y sobre lo cual no tenemos respuesta. Los investigadores, psicólogos, pedagogos, responsables de medios de comunicación deberían empezar a tomarlo como objeto de investigación y darnos elementos a quienes debemos tomar decisiones.

–En estos casos, ¿qué papel le asigna a la sanción?

–Nuestra función es educar, no es sancionar por sancionar. Algunos dicen que frente a esto que hay que echar al alumno: habrá que cambiarlo de escuela, buscar el lugar más adecuado, pero nuestro trabajo es educar.

–El gobierno porteño de Mauricio Macri presentó una denuncia penal por la toma del colegio Mariano Acosta. ¿Cómo analiza esa judicialización de la protesta estudiantil?

–No me atrevería a juzgar la actitud del gobierno de la ciudad. Lo que me parece es que estas estrategias de ocupación, toma de colegios, cortes de calle no son conductas que debamos estimular ni permitir. Son menores de edad y, además, la toma del colegio no es una metodología que permita avanzar en la solución del problema. Ahora, si hay que judicializarlo o no es otra cuestión. Tenemos que actuar educativamente, estamos ante chicos, son alumnos, ese mismo diálogo, ese mismo conflicto forma parte del proceso educativo. Eso tiene que ver con nuestra cultura. Acá todo el mundo ocupa, corta las calles, apela al método de la ruptura del diálogo inmediatamente. Hay que convocar a los chicos y también a los padres, que entiendan que sus hijos están para ser educados. Ellos también tienen que colaborar en esa tarea sin negar la justicia o no del reclamo.

–Educación sexual, adicciones, cuestiones de género, nuevos valores hacen a los temas que tienen que incorporar los docentes además de los saberes específicos. ¿Cómo se los prepara para esa complejidad?

–Por un lado, estamos trabajando en la formación inicial de los docentes incorporando estos temas. Para los docentes que ya están en servicio, la vía que estamos ensayando es la del trabajo en equipo y la de la responsabilidad institucional, colectiva, frente a estos nuevos desafíos. Estos temas no interpelan al docente individualmente ni en su trabajo en el aula. La unidad de desempeño de los docentes hoy es la escuela y es el equipo docente el que debe enfrentar esas cuestiones: los temas de convivencia, formación en valores, adicciones. Por eso hemos iniciado procesos de autoevaluación institucional para que analicen qué anda bien y qué no. En los diarios sale lo que anda mal, pero tenemos 50 mil escuelas, diez millones de alumnos y la mayoría funciona bien. Hay que apostar a eso y a formación más profesional en problemas nuevos, así como hablábamos de los medios, por ejemplo el tema adicciones, también es nuevo en la escuela, tenemos que apelar a nuevos conocimientos, capacitación en servicio, que es mucho más importante hacerla en la escuela (el director, el supervisor y los docentes, todos juntos), que seguir apostando a los cursos de capacitación individuales fuera de la escuela.

–Hay 6 millones de personas de entre 18 y 45 años que no terminaron la escuela secundaria. ¿Cómo se piensa reclutar a esa gente para que el Plan Fines sea significativo?

–El plan está pensado en dos grandes etapas: la primera ya empezó, está destinada a todos aquellos que hicieron hasta 5º año y no lo terminaron, que dejaron materias. Son muchos: en los últimos años el promedio es de 80 a 90 mil chicos por año que no egresan por esa causa. Se les estará ofreciendo la posibilidad de que rindan las materias que deben, les pondremos tutores. A partir de 2009 ya empieza el trabajo con los jóvenes adultos que deben un año, dos o todos. La estrategia está basada en ir a buscarlos a su lugar de trabajo, de participación social. Se están haciendo convenios con los sindicatos, ministerios, municipios, organizaciones sociales, barriales, de manera que tengamos casi un programa a la carta. Lo que no queremos, porque sabemos que no funciona, es ofrecerles el modelo de escuela nocturna a la cual tienen que ir todos los días. Sabemos que no vamos a llegar a los 6 millones, pero quisiéramos lograr un impacto muy significativo. Es un programa a término, la población tiene que saber que tiene esta oportunidad y la tiene que aprovechar. Esto no va ser eterno. En los próximos días vamos a firmar convenios con 40 sindicatos.

–Las estadísticas muestran también que la mitad de los chicos no termina el secundario. El ministerio habla de hacer foco en la reforma de ese nivel. ¿Por dónde pasa esa transformación y en qué tiempos?

–El segundo semestre del año lo vamos a dedicar a debatir sobre la nueva escuela secundaria. Estamos iniciando consultas sobre los primeros borradores, vamos a elaborar un nuevo borrador más avanzado. La primera medida concreta de transformación es hacer el debate nacional. Hay muchos problemas de la secundaria que desde el momento que ha sido declarada obligatoria son problemas y que antes no lo eran, se lo veía como algo natural: si hoy uno tiene en una escuela cinco divisiones de 1er. año y una de 5º...

–Es decir que cuatro de los cinco que empiezan no terminan...

–Hasta antes de la sanción de la ley eso no era un problema grave, hoy es una ilegalidad. Seamos serios, no se va resolver esto de un día para otro, pero sí necesitamos avanzar en esa línea de desnaturalizar algunos problemas. Quisiéramos que esta nueva escuela tenga un eje fundamental en la orientación. Un chico al terminar la secundaria tiene que ser capaz de decidir qué quiere seguir estudiando. Si no quiere estudiar, en qué quiere trabajar, en qué tiene que estar formado en el desempeño ciudadano, definir su proyecto de vida. Tiene que haber una escuela secundaria que ofrezca posibilidades de aprendizaje en todas las dimensiones, en lo científico, artístico, humanístico, deportivo. No hay manera de saber si uno es capaz de algo si no hace la experiencia. También implica un cambio en los métodos de evaluación. Todos los métodos de evaluación de la escuela tradicional estaban basados en la idea de que si alguien no aprendía se iba. Hoy tenemos la obligación de que todos aprendan, por eso pensamos en una escuela secundaria con mayor característica institucional: que los profesores sean profesores de la institución, que tengan horas de trabajo institucional, que trabajen en equipo, que ejerzan cierto monitoreo sobre los chicos que están necesitando mucha guía, que haya más adultos significativos en la secundaria. Estos cambios no se hacen por decreto, son cambios culturales, tanto de los profesores y los alumnos como de las familias. Es un proceso largo.

–¿No van a tardar 80 años para que se aplique plenamente?

–Esperamos que no, porque ahora los procesos son más rápidos, pero no pidamos que en cuatro o cinco años esté resuelto.

–Respecto de las 500 mil becas de nivel medio, ¿hay un seguimiento en cuanto a la continuidad de los chicos en el sistema?

–Lo que estamos dando como beca, en algunos casos no es suficiente. Estamos dando una beca de 600 pesos por año. Lo que nos está pasando es que un chico de 15, 16, 17 años si se consigue un trabajo deja la escuela. Estamos en un momento especial porque empieza a haber trabajo, el chico tiene la opción de estudiar o trabajar, y las familias no están tan bien como para no necesitar que el chico trabaje para cubrir sus necesidades. La ayuda de la beca es importante. La reflexión que nos hacemos es si no estuvieran esas becas sería mucho peor. Sabemos que esta estrategia tiene que mantenerse, pero la verdad es que tiene que ser transitoria; confiamos en que el país crezca y en que la distribución del ingreso sea cada vez más justa como para que no haya necesidad de que el Estado tenga que subsidiar a la familia para que pueda enviar a sus hijos a la escuela obligatoria. En un país con la distribución de la riqueza justa no habría necesidad de hacer esto. Si tenemos que aumentar la cantidad de becarios quiere decir que está aumentando la cantidad de pobres y eso no es una buena señal.

–En varias provincias, los sindicatos docentes piden una recomposición salarial por los aumentos de precios. ¿Hay posibilidad de aumentos en el marco de la paritaria nacional?

–Por ahora no está en la agenda.

–Usted tenía buen diálogo con Alberto Fernández. ¿Qué expectativa tiene sobre el nuevo Jefe de Gabinete, Sergio Massa?

–A Massa lo conozco de su gestión en la Anses muy transitoriamente y después como intendente de Tigre, muchas veces colaboramos en los programas educativos del municipio. Me parece un hombre muy inteligente, activo, con gran capacidad de gestión, confío en que nos vamos a poner a trabajar rápidamente. Iniciaremos un vínculo que, creo, va a ser tan positivo como lo fue con Alberto Fernández. Quizás haya cambios de estilo personal, pero estoy muy esperanzado y confiado en que esto va a andar.

–Como ministro independiente ya tuvo muchos actos peronistas...

–No. Tuve actos no peronistas, del Gobierno, de las fuerzas políticas, intelectuales, que apoyan el proyecto del Gobierno. Nunca me sentí forzado, creo que los debates de estos últimos meses convocaron a un sector de la sociedad más que a un partido político. Este ministerio siguió trabajando con el mismo espíritu plural y abierto con el que lo venía haciendo.

–Es decir, cantando el Himno Nacional y no la Marcha Peronista.

–No creo que me hayas visto.

–Me sorprendería, pero bueno...

–Cantando el Himno y Aurora también.

viernes, 25 de julio de 2008

Sin recreo: niños sobreexigidos

Publicó Acción Digital
Segunda quincena de julio de 2008

Idiomas, computación, música, deportes y talleres de todo tipo llenan la agenda de una generación de chicos sin tiempo para jugar. Con padres apurados por verlos triunfar y un mercado ávido de nuevos consumidores, ellos enfrentan, como pueden, presiones propias del mundo adulto. Estrés infantil, sobreadaptación y psicofármacos


Por Maria Jose Ralli

Alicia tiene sólo cuatro años. Desde los dos aprende francés, el idioma que ama su madre y que también habla. Tímida, cuando alguien le pide que hable en francés, la nena se pone colorada y apenas pronuncia unas palabras. La mamá la mira seria, y cuenta que acaban de volver de un viaje a París, a donde la llevó para ver a su abuelo y, de paso, familiarizarse con la lengua. “La verdad, el viaje estuvo lindo, pero Alicia no habló tanto en francés como yo esperaba”. Los padres esperan mucho de sus hijos, a veces demasiado. Más de lo que los niños pueden o quieren, a una edad donde lo primero –y lo más divertido– es el juego. Idiomas, computación, música, deportes, pintura, talleres de expresión. Una agenda completa que se suma a la escolaridad y hace que la jornada de los chicos se vuelva tan completa y agotadora como la de los adultos. O más aún. Las cuatro horas de clase que eran la norma hace algunas décadas se van extendiendo, sobre todo en los hogares de clase media y alta, a seis, siete y hasta ocho, con la consiguiente reducción del tiempo libre, en una sociedad donde el ocio se vuelve un bien demasiado escaso. La tendencia a la doble jornada crece también entre las escuelas públicas: en el caso de la ciudad de Buenos Aires, la oferta de jornada completa se incrementó un 16% en una década. Hoy las escuelas que la ofrecen son 245, frente a 207 de jornada simple.
Pero, ¿hasta dónde el deseo de los padres por ver crecer a sus hijos en el camino hacia el éxito es lo que los más pequeños desean y necesitan? La sobreexigencia es una mochila muy pesada. Las jornadas llenas de compromisos presionan a los chicos, muchas veces por una necesidad de cubrir horas en que los padres están ausentes y, otras tantas, por la avidez de crear talentos o futuros “ganadores” en una sociedad que aún vive las consecuencias del brutal proceso de exclusión de los 90. En este contexto, psiquiatras y psicólogos especializados en infancia y adolescencia alertan sobre la creciente cantidad de casos de estrés en edades tempranas. Ser el líder, el mejor, tiene su precio. Demasiado caro cuando se trata de niños.
Al menos así lo ven los adultos, quienes temen que sus hijos arriben al futuro sin las herramientas que ellos consideran necesarias para defenderse. Los profesionales aseguran que cada vez son más los padres preocupados por los comportamientos de sus hijos y su estrés, muchas veces provocado por las propias presiones familiares. Y si bien no existen cifras oficiales, se estima que las consultas por estos temas crecieron en un 50% en los últimos dos años, con el agravante de que los pacientes tienen cada vez menos edad.
Planificar actividades sin escuchar los deseos de los chicos y ocupar el tiempo de manera indiscriminada sin tenerlos en cuenta ni indagar en sus preferencias empobrece la creatividad y restringe la posibilidad de que, improvisando en el uso del tiempo libre, los niños investiguen, descubran el mundo. Incluso procedimientos como la estimulación temprana, el método que el pedagogo americano Glenn Doman puso en práctica en la década del 40 en su Instituto para el desarrollo del potencial humano de Filadelfia, basándose en la idea de que desde los 0 hasta los 3 años es cuando los niños aprenden más y mejor, fue dejando paso a herramientas de perfeccionamiento, a máquinas de crear genios, apartando la posibilidad de los procesos espontáneos. El deseo de que todo se aprenda, y ya, de manera inmediata, atenta con la libertad de los más chicos. La libertad de elegir, de crear sin limitaciones, de ser legítimos en sus expresiones y de prescindir, al menos durante algunas horas por día, del control de los adultos. El renombrado pedagogo italiano Francesco Tonucci lo ilustra con una frase: "Quiero una cancha de fútbol sin entrenador". Es que, en muchos casos, las presiones del mundo de los adultos pueden invadir también los espacios reservados para el juego, que se convierte así en una obligación más: juguetes didácticos para que no “pierdan el tiempo” mientras se divierten, películas para pequeños genios, torneos deportivos con un público de padres demasiado fervorosos, en ocasiones violentos, en su deseo de que ganen sus hijos, como si, en lugar de jugar, los niños se estuvieran jugando la vida. Tonucci es terminante: “Los niños están hartos de adultos”. Hoy, agrega, los chicos no juegan a la pelota, van a estudiar fútbol.

Porque sí
Si se les preguntara a los chicos qué quieren hacer en cualquier momento del día, cualquier día de la semana, la respuesta será –sin dudarlo ni siquiera un segundo– “jugar”. A ninguno se le ocurriría decir “quiero aprender a tocar el piano”, “estudiar francés”, “practicar violín”.
Jugar, algo tan simple como importante. Placentero, por sobre todas las cosas, pero también necesario. El juego permite cambiar roles, expresar sentimientos, elaborar situaciones, descargar tensiones. El juego es un vehículo para la adquisición del lenguaje y ayuda al niño a asimilar las experiencias que tiene y así lograr su propio entendimiento del mundo. Es, principalmente, el lenguaje de los más chicos, a través del cual se comunican con el otro. Mientras juegan expresan deseos, fantasías y temores, su percepción del mundo y de ellos mismos. “Todas y cada una de las adquisiciones que un niño hace, las hace a través de la actividad del jugar”, señala al respecto el psicoanalista Ricardo Rodulfo, quien alude así a los procesos más simples de la vida infantil, pero también a los más complejos. Por ejemplo, “la rica vocalización del bebé durante el primer año de vida es un despliegue de juego sonoro que constituye la vía para la adquisición del lenguaje propiamente dicho. Si esta vía se ve cerrada o seriamente interferida, el efecto será el mutismo o diversos grados de ecolalia. En este sentido, diversos disturbios en los procesos de aprendizaje durante la niñez y la adolescencia hallan su causa en tempranas patologías del jugar”.
Jugar es imprescindible para el desarrollo psíquico, pero además es sencillo, fácil y gratis. Tonucci, cuyas ideas contradicen en muchos aspectos el sentido común acerca de qué es o debería ser un niño, qué quiere y qué necesita, viene insistiendo desde hace años en la necesidad de garantizarles a los niños algo que parece simple, pero que muchos padres no están dispuestos a aceptar: unas horas de juego al día, tanto o más importantes que las horas de sueño. En otras décadas, cuando las teorías de autores como Freud o Piaget –o sus versiones de bolsillo– no estaban al alcance del padre promedio, a los niños no se los tenía en cuenta. “El niño era un animalito simpático y querido, pero lo importante era que pasara esa temporada de la infancia, que no valía nada, y llegara el momento de la adolescencia y la juventud, para ser como nosotros”, asegura Tonucci. Hoy, en cambio, se sabe que los niños “son importantes” Y, por eso, “no tienen que perder el tiempo”. Mientras nosotros seguimos jugando a la pelota todas las veces que podemos, hay niños que no pueden ver el balón porque están hartos del instructor. Con esto, “el tiempo libre de los niños ha desaparecido”.
La psicoanalista Beatriz Janin da una vuelta de tuerca relacionada con la situación particular que viven las familias argentinas desde que, en la década del 90, fueron testigos y protagonistas de un profundo proceso de fragmentación. “Vivimos en una sociedad excluyente y la idea, todo el tiempo, es que la gente está como en un borde y se puede caer. Se supone que si un chico no cumple con los requisitos de la escuela, se cae del sistema. Entonces hay que hacer el esfuerzo que sea para que no se caiga, tiene que ser eficiente, tiene que producir”.
Pero no se trata, para la especialista, de la misma exigencia que los padres inmigrantes de mediados del siglo XX ponían en la esperanza de que sus hijos llegaran a ser médicos, abogados o ingenieros. “No es la idea de M’hijo el dotor, sino una exigencia basada en una situación de angustia. Ni siquiera es una exigencia para triunfar, es una exigencia para no caerse, para no quedar afuera. Es una exigencia desde la angustia de los padres, que promueve también mucha angustia en los chicos . En esta sociedad fragmentada donde vale más producir, lograr, llegar, la presión por el éxito forma parte de lo cotidiano. Los adultos enloquecen a su ritmo, y los chicos van prendidos a ese tren. Estar entrenados, tener training desde la infancia ya es parte de su formación y educación. Algo que no es saludable, y trae también consecuencias”.

A cualquier precio
La sobreexigencia infantil es una problemática que se da en todo el mundo, y la Argentina no es la excepción. Y enciende cada vez más alarma, porque además de efectos psicosomáticos como el asma, enfermedades gastrointestinales o ataques de estrés o pánico, aparecen problemas de conducta y de aprendizaje. En muchos casos, estos trastornos son síntomas que responden a situaciones que a los padres les cuesta ver, como angustia o miedo, que no se manifiestan en el juego porque las agendas apretadas de los chicos les impiden divertirse y manifestar sus emociones.
En los Estados Unidos, el 10% de los niños menores de diez años está medicado como resultado de haber sido diagnosticado como ADD (siglas en inglés del Trastorno por Déficit de Atención). En la Argentina, los datos no son oficiales, pero se calcula que entre un 3 y un 5% de la población educativa de nivel primario ha sido diagnosticada con este síndrome que despierta desde hace años polémicas y cuestionamientos en el campo de la salud. Más de 150 profesionales argentinos advertían hace ya dos años, en una carta abierta al Ministerio de Salud, que muchos niños estaban siendo medicados desde edades muy tempranas “como solución mágica frente a las dificultades escolares”. “El consumo de psicofármacos para niños –señala al respecto el psicoanalista Juan Vasen– es muy intenso en nuestro país y se encuentra liderado por el metilfenidato”, una droga cuyo volumen de ventas constituye, sobre todo en los Estados Unidos, un verdadero fenómeno de ventas, a pesar de los riesgos que entraña, ya que se trata de un tipo de anfetamina que la propia DEA ha catalogado como de “alto potencial para el abuso”.
Estar más atento en clase, soportar largas jornadas de estudio, volverse, en palabras de un estudio de la Universidad de Lausana, Suiza, más “dócil y manejable”: todo es posible con tratamiento farmacológico. Hay algo que sin duda no anda bien. Es el reflejo –al menos en parte– de una sociedad que corre detrás del éxito a cualquier costo, y que no todos alcanzan. “En estos tiempos hay niños que enfrentan presiones sobrehumanas de eficiencia. Expectativa casi robótica ante la cual Tiempos modernos podría pasar por una película filmada en cámara lenta”, asegura Vasen. Los chicos “son sujetados a un marcapasos social que suele asumir un ritmo cocaínico, y que les impone las pilas para que puedan andar a mil. Con lo que no sólo dejan de ser niños, casi dejan de ser humanos”.

Sometidos a esclavitud

Publicó Página/12
25 de julio de 2008

Treinta y siete personas de nacionalidad boliviana, entre ellas seis menores, que trabajaban en condiciones de esclavitud en un taller textil, fueron liberadas hoy tras allanamientos realizados en la localidad bonaerense de Longchamps, partido de Almirante Brown. Sus explotadores les pagaban un peso por prenda confeccionada y los obligaban a vivir en el taller donde se desempeñaban, en condiciones de hacinamiento, y a comprar comida a precios sobrevaluados en el mercado de la suegra del dueño del taller, aseguraron fuentes judiciales. Por el caso hay tres detenidos, todos miembros de una familia también oriunda del país vecino, mientras que el máximo responsable continúa prófugo.

Corsi, el jefe de la banda pedófila, se negó a declarar

Publicó Crítica Digital
25 de julio de 2008

Tras la negativa fue trasladado a Tribunales juntoa los otros dos acusados. Conmoción entre los psicólogos y en el propio gobierno.

El reconocido psicólogo Jorge Corsi, acusado de liderar una banda de pedófilos, se negó esta noche a declarar en la causa en la que, junto a otras dos personas, está imputado de corrupción de menores, abuso deshonesto y asociación ilícita. Tras la negativa ante la jueza de instrucción María Fontbona de Pombo, titular del juzgado 45, fue trasladado en calidad de detenido a la Superintendencia de Investigaciones de Villa Lugano, en Capital Federal.

Los otros dos imputados, el profesor de música Marcelo Rocca Clement, quien tiene antecedentes de pedofilia, y el profesor de educación física Augusto Correa, prestaron declaración indagatoria y pasadas las 21.30 fueron trasladados, según precisaron fuentes judiciales a la prensa.

Los investigadores intentan determinar las ramificaciones de la banda y hay al menos cuatro personas prófugas y un cuarto imputado no procesado vinculado a la causa. Existe material probatorio, como polículas en DVD, escuchas telefónicas y cruzamiento de llamadas.

Fuentes de la investigación no descartaron efectuar más allanamientos en las próximas horas para dar con el paradero de un joven de 22 años, en cuyo domicilio - como en el de Corsi- se habrían realizado las "fiestas sexuales" que tenían a los menores como víctimas.

Corsi, psicólogo, titular de la carrera de posgrado de Especialización en Violencia Familiar de la UBA, era hasta ayer uno de los más reconocidos del país en el tratamiento del maltrato infantil y el supuesto jefe de la banda de pedófilos que habría abusado de seis chicos de clase media y alta de Recoleta, Palermo y Barrio Norte.

El ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Aníbal Fernández, calificó hoy como "una situación absolutamente desagradable" que el supuesto jefe de una banda de pedófilos sea un reconocido psicólogo que trabaja en el tema de maltrato infantil, pero que "no hay ningún tipo de freno en el análisis y en el seguir ahondando en lo que viene investigando la fiscalía, para avanzar con todo en la resolución del tema".

En otro orden, las autoridades de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (UBA) instruyeron a sus abogados para que investiguen la situación de Corsi y evalúan la posibilidad de dejar sin efecto el contrato que lo liga a esa casa de altos estudios.

El departamento de prensa de la Facultad de Psicología señaló en un comunicado, que "habiendo tomado conocimiento a través de los medios de un hecho delictivo en el que estaría involucrado un profesor de esta facultad, la Asesoría Legal de esta Institución hará las averiguaciones correspondientes en sede judicial".

En ese sentido, señaló que "en base al resultado de las mismas tomará las medidas pertinentes al caso".

Fuentes de esa facultad aclararon que "como Corsi se desempeña en una carrera de posgrado, no es personal efectivo y tiene un contrato en vigencia". Por eso, indicaron que "hay que esperar los tiempos judiciales" y admitieron que "una de la medidas puede ser dar de baja el contrato de Corsi".

¿REHÉN DE SUS PALABRAS?
“Hay casos que sirven para mostrar que detrás de imágenes en apariencia insospechables puede existir la violencia”, le dijo el psicólogo Jorge Corsi a Crítica de la Argentina cuando se lo consultó sobre el encubrimiento de muchos hombres violentos que aparentan no serlo. Corsi era el director de la carrera de Especialización en Violencia Familiar de la UBA y había estado al frente del Observatorio de Violencia de Género de la Ciudad de Buenos Aires. También en España es profesor del máster Interdisciplinario en Estudio sobre Violencia Doméstica de la Universidad Autónoma de Barcelona.

¿Ahora Jorge Corsi puede ser rehén de sus propias palabras? Corsi tiene 64 años, es soltero y no tiene hijos, pero sí un currículum avasallante y cinco libros, entre ellos: Violencia familiar (una mirada interdisciplinaria sobre un grave problema social); Violencia masculina en la pareja (una aproximación al diagnóstico y a los modelos de intervención), y Maltrato y abuso en el ámbito doméstico (fundamentos teóricos para el estudio de la violencia en las relaciones familiares), de Editorial Paidós.

Hay 30.000 chicos bonaerenses que no acreditan su identidad

Publicó La Nación
25 de julio de 2008

Título original:
El calvario de vivir sin documentos

La historia de una mujer con cuatro hijos que no tienen DNI y que no pueden conseguir trabajo

Por Pablo Morosi
Corresponsal en La Plata

A PLATA.- "Yo no puedo andar por la calle tranquilo. No consigo laburo, la gente me mira mal. Estoy harto de no ser nadie", se lamenta Horacio, uno de cuatro hermanos, de entre 16 y 23 años, que comparten el calvario de no tener identidad.

Claudia Quiroga, de 41 años, vive con sus hijos indocumentados en Bernal Oeste, partido de Quilmes, a menos de 30 kilómetros de la Capital, y espera desde hace casi cuatro años la resolución de dos expedientes judiciales que les permitan a los jóvenes obtener su DNI.

"No sé ya qué hacer, trato de cumplir con todo lo que me piden y siempre las cosas se complican, se vencen los plazos y todo se traba", dice Claudia, rodeada de tres de sus cuatro hijos. Además de Horacio, de 21 años, están Verónica, de 19, y Diego, de 16. El mayor, Daniel, de 23, está en un trabajo que consiguió pero que, como casi todo lo que les ha ocurrido en la vida, es provisorio hasta que pueda aportar sus datos filiatorios.

Aunque parezca increíble, todos los hijos de Quiroga cursaron la escuela primaria. Tiene fotos de actos, con sus maestras y compañeros, pero nunca obtuvieron certificados oficiales de los estudios realizados. Luego, todos concurrieron a la Escuela Media N° 6: Daniel abandonó para trabajar; Verónica dejó en primer año para cuidar a su hijo de un año y medio; Horacio se está por recibir, y Diego cursa primer año. Claudia agradece la predisposición de los directivos de los establecimientos educativos por haber cobijado a sus hijos sin contar con la documentación requerida.

Esta historia comienza en la Capital hace 41 años, cuando Claudia Quiroga nació y nadie la anotó en el Registro de las Personas. Al poco tiempo su madre murió y ella sólo consiguió su documento a los 22 años, cuando dos de sus hijos ya habían nacido y estaba embarazada del tercero. La mujer prefiere no ahondar sobre aquellos años y que tan sólo evoca como "muy malos". "Estaba atravesando una situación muy complicada, y si no hice los trámites no fue por quedada, sino porque realmente no estaba en condiciones", reconoce. Su crítica situación económica le impidió, incluso, poder pagar el costo del certificado de nacimiento de sus dos últimos hijos en el hospital Isidoro Iriarte, de Quilmes.

A medida que los chicos crecían también lo hacía su demanda por tener sus papeles en regla. Daniel quería un documento para conseguir empleo; Verónica quedó embarazada y no pudo reconocer a su hijo, que tiene DNI gracias a su padre; Horacio perdió varias oportunidades laborales por no poder completar los formularios.

En la Justicia

Las causas para pedir a la Justicia el documento de identidad fueron presentadas a fines de 2004 en el Tribunal de Familia N° 2 de Quilmes, presidido por Enrique Hollman.

El magistrado dijo que si bien se realizaron los peritajes correspondientes para determinar la consanguinidad y la confirmación de edades de los jóvenes, aún resta aportar los certificados sobre los antecedentes penales de una persona. "Me da la sensación de que hay una morosidad en esta diligencia que es lo que destrabaría todo", dijo Hollman a LA NACION.

"Si el juez dice eso, es porque no ha visto la causa. Hace tiempo que me gustaría hablar con él para explicarle la situación insostenible que estamos atravesando. Yo el trámite de reincidencia ya lo hice tres veces", afirma Claudia en la cocina de su humilde vivienda en el barrio La Cañada.

Quiroga inició la causa judicial para conseguir la documentación de sus hijos luego de un incidente policial que involucró a Daniel, el mayor. En un operativo policial el joven fue detenido como sospechoso de un robo. Estuvo 22 días preso, y aunque, finalmente, no fue imputado, la causa sigue abierta. Ahora el muchacho y sus hermanos temen salir a la calle.

En febrero último, fuentes de la Dirección General de Cultura y Educación provincial revelaron que un censo realizado en la mitad de las escuelas provinciales determinó que unos 30.000 chicos no tenían documentos ni partidas de nacimiento. El director general de Escuelas, Mario Oporto, aseguró entonces que se buscaba que "no haya ningún chico sin escuela ni ningún chico sin identidad". Ayer, voceros de la cartera educativa afirmaron que el plan está en marcha, pero no pudieron dar detalles de sus resultados.

En el Registro Provincial de las Personas, encargado de distribuir los DNI, dijeron: "No estamos en conocimiento de este caso". Fuentes del organismo reconocieron, sin embargo, que existen situaciones similares e indicaron que facilitan la documentación cuando existe una demanda concreta, que, en este caso -dicen-, no habían recibido.

Fue violado y ahora reclutaba a adolescentes para su abusador

Publicó Clarín
25 de julio de 2008

Tiene 20 años y lo violaron hace 8. Entre aquellos abusadores estaba el profesor de música ahora preso junto a un profesor de gimnasia y al psicólogo. Este quedó aún más comprometido por el testimonio del chico que lo denunció.

Por Leonardo De Corso y Virginia Messi

En 2000 tenía 12 años y fue abusado por un grupo de pedófilos, entre los que estaba el profesor de música Marcelo Rocca Clement, entonces de 26 años, preso, excarcelado y a la espera de un juicio por ese caso.

Desde aquel episdio pasaron 8 años. Sin embargo hoy sus nombres vuelven a estar juntos en un expediente: Rocca Clement fue detenido el miércoles, junto al prestigioso psicólogo Jorge Corsi (62), por tener relaciones sexuales y filmar a un chico de 14 años. Y aquel nene de 12 años, ahora de 20, fue uno de los jovenes que lo ayudó a encontrar nuevas víctimas.

"No podíamos creer que fuera el mismo chico; parecía increíble, pero chequeamos los datos y así es", le dijo a Clarín una fuente del caso. El fiscal pidió su indagatoria como reclutador pero, por ahora, es considerado una victima.

Con este terrible panorama se encontraron los policías de la Federal y el fiscal Martín Niklison cuando comenzaron a investigar una denuncia presentada en marzo del año pasado y que terminó esta semana con la detención de Corsi, Rocca Clement y el profesor de gimnasia Augusto Correa (26). Los tres fueron llevados ayer al despacho de la jueza María Fontbona de Pompo para declarar en indagatoria. Una de las principales pruebas en su contra es la declaración del chico de 14 años cuyos padres iniciaron la causa en 2007.

El menor fue captado en un local de comidas rápidas de la avenida Córdoba y Acuña de Figueroa. Entre propuestas de jugar al fútbol, regalos y engaños varios terminó enredado en una serie de fiestas sexuales con adultos que lo hicieron estallar a principios del año pasado. Una noche no aguantó más su secreto y le contó todo a sus padres.

Hizo falta un mes y medio de tratamiento psicológico para que pudiera dar su testimonio a la Justicia. Fueron dos días de declaración en una cámara Gesell. La síntesis de lo que dijo el chico muestra un modus operandi casi idéntico al descripto en la causa de 2000, actualmente en el Tribunal Oral 12 de la Capital Federal.

El menor también ayudó a identificar a los abusadores: "A Rocca Clement lo conocía por el apodo de Marche ; a Corsi por el de Geo y a Correa simplemente como Augus", reveló a Clarín una fuente del caso. Aunque el menor no sabía el nombre de Corsi dio pistas que sirvieron para identificarlo. "Dijo que era pelado, psicólogo, dio la dirección casi exacta, comentó que viajaba mucho a España y que tenía un gato", agregaron las fuentes.

El chico contó que estuvo con "Geo" cinco veces, que lo fotografiaron y filmaron con una cámara web y que otros dos chicos estaban en su misma situación. "Esas otras dos víctimas están identificadas y ahora hay que llamar a sus padres e informarles lo que ha ocurrido", dijo un investigador.

Con los datos aportados en cámara Gesell, la Policía se puso a buscar a los responsables de los abusos. Un primer psicólogo, de características parecidas a Corsi, fue investigado en un principio pero ya en diciembre del año pasado el prestigioso experto en violencia familiar había sido identificado debido a las constantes llamadas entre él y Marcelo Rocca Clement
Y Clement no sólo estaba identificado en la causa de Niklison y Fontbona de Pombo sino que contaba con el importante antecedente del expediente de 2000, a cargo del entonces juez Mariano Bergés.

En esa causa no aparece Corsi pero el profesor de música está acusado de "abuso sexual con acceso carnal, tentativa de abuso sexual reiterado (dos ocasiones), abuso sexual gravemente ultrajante reiterado (tres oportunidades) en concurso real con promoción de la corrupción de un menor de edad".

Aunque, según aseguran los investigadortes, las pruebas son contundentes y la causa contra Rocca Clement fue elevada a juicio a mediados de 2006, el profesor de música logró ser excarcelado hace unos cinco años. La razón: estuvo preso más de dos años sin tener una sentencia.

El recuperó la libertad pero, al parecer, su primera víctima acreditada (aquel chico que tenía 12 años, hijo de una encargada de un edificio de Barrio Norte) quedó atrapada y sin salida.

El régimen penal de los menores

Publicó Clarín
25 de julio de 2008

Editorial

El trato que reciben los menores en la Justicia sigue presentando deficiencias, debido fundamentalmente a la persistencia de un régimen tutelar que, en la práctica, impide el ejercicio de la defensa en juicio y ha recibido severos cuestionamientos por sus lesiones a la Constitución y a los tratados internacionales.

Así, en jurisdicción nacional se aguarda la postergada sanción de un régimen procesal penal para los menores, un tema sobre el cual existe un amplio consenso sobre su necesidad. En cambio, en la provincia de Buenos Aires comenzó a funcionar un nuevo sistema de juzgamiento para los menores que cometan delitos, los cuales tramitarán por ante el flamante Fuero Penal de Responsabilidad Juvenil. Si bien la Corte provincial advirtió que no están dadas las condiciones para el funcionamiento adecuado de este nuevo fuero, ha comenzado a funcionar en cuatro distritos: La Plata, Quilmes, Necochea y San Martín. En agosto se sumarán otras jurisdicciones. A través de este cambio procedimental, los menores de entre 16 y 18 años dispondrán de derechos similares a las personas mayores en el desarrollo de la causa.

Además, y como en la Provincia había sido muy cuestionada la actuación policial ante los menores, se acordó que los agentes no podrán interrogar a los chicos. También se dispuso limitar la extensión de la prisión preventiva y establecer la competencia de los Tribunales de Responsabilidad Penal Juvenil para los delitos de gravedad, como homicidios, abusos sexuales, privaciones ilegítimas de libertad y secuestros.Es necesario, por lo tanto, proporcionar a los menores un trato institucional legítimo y no arbitrario, con respuestas que contribuyan a la reparación de los daños, a la mejora del clima de convivencia y a la remoción de factores perturbadores como las adicciones y la exclusión social.

El trato judicial a los menores es deficiente y se posterga la sanción de un régimen procesal. En la provincia de Buenos Aires comenzó a funcionar un Fuero Penal de Rsponsabiliad Juvenil y nuevas instrucciones para su tratamiento policial .

Sigue la toma en el Mariano Acosta por el recorte de becas

Publicó Página/12
24 de julio de 2008

Título original: Un recorte que puede salir caro

Los estudiantes tomaron el colegio el martes para reclamar por el drástico recorte en la entrega de becas para chicos de bajos recursos: de 200 pedidas, sólo otorgaron 48. “No vamos a tolerar” la toma, dijo Macri. Harán una denuncia en la Justicia.

No vamos a levantar la medida hasta tanto el gobierno no asegure las becas a los 200 chicos que las necesitan”, afirmó Esteban, uno de los voceros del centro de estudiantes secundarios de la Escuela Normal Nº 2 Mariano Acosta. Se refería a la toma del edificio que un numeroso grupo de alumnos del establecimiento lleva a cabo hace dos días para rechazar la reducción que el gobierno porteño realizó en el número de becas de asistencia económica que entrega todos los años a chicos de escasos recursos. Mientras el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, ratificó el recorte en ese servicio, fuentes del Ministerio de Educación de la ciudad confirmaron a PáginaI12 que demandarán ante la Justicia porteña “por ocupación de espacio público a los adolescentes y los adultos que permanecieron dentro del establecimiento fuera del horario escolar”.

La medida de fuerza que mantiene abiertas y ocupadas con más de 400 adolescentes las aulas del Mariano Acosta nació como respuesta al “recorte del 75 por ciento de las becas estudiantiles que fueron solicitadas (en esa institución), sin razón explícita”, sostuvo Tomás, uno de los miembros del centro. Es que, de los 200 estudiantes de ese establecimiento que solicitaron la asistencia, que el Estado porteño les otorga en concepto de “apoyo necesario para facilitar la continuidad en sus estudios”, sólo la recibieron 48.

Sin embargo, el recorte no los afectó sólo a ellos. En 2007, el gobierno repartió alrededor de 64 mil becas de entre 500 y 150 pesos entre todos los establecimientos educativos estatales de la ciudad. En cambio, aunque el monto de cada asistencia fue mayor –entre 600 y 800 pesos– la cifra de becas entregadas en toda la ciudad en 2008 se redujo a 30 mil.

Al respecto, el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, ratificó la reducción en el servicio y adujo que “hicimos un esfuerzo por diferenciarnos de las becas que se daban el año pasado, ya que no alcanzaban para nadie, por lo que no vamos a tolerar que un grupo minúsculo de estudiantes que toman el Mariano Acosta perjudique al resto de los alumnos”. El viceministro del Ministerio de Educación, Walter Bouzada, había mostrado una posición más flexible: “Habrá una solución institucional” a la falta de becas, dijo.

Los alumnos del Mariano Acosta habían solicitado el lunes una reunión “de urgencia” con una autoridad “competente” del Ministerio de Educación porteño “para que pueda explicar las razones del recorte, sin obtener ninguna clase de respuesta”, aseveró Matías, otro de los voceros del centro.

Frente a esta situación, el martes por la mañana y luego de una asamblea, los chicos decidieron concretar la toma de la escuela con suspensión de las clases “sólo del nivel secundario”. En tanto, fue el propio ministro de Educación, Mariano Narodowski, quien ordenó la interrupción en la enseñanza de los niveles primario y terciario. “Mientras siga la ocupación no se dictan clases”, aclaró durante el transcurso del primer día de conflicto.

Además de la reducción en las becas, los estudiantes denuncian “el atraso de más de tres meses en el proceso de análisis de datos y la selección arbitraria de las personas a las que fue otorgada la ayuda, ya que en ningún caso se hicieron presentes los asistentes sociales del gobierno para corroborar las necesidades de cada familia”, explicaron.

En tanto, las vías para llegar a una solución del conflicto ingresaron en un terreno cubierto de obstáculos. Mientras funcionarios del gobierno porteño fijaron su postura de no dialogar “hasta tanto no se levante la toma”, desde el centro de estudiantes ratificaron la medida “en principio hasta el viernes (por mañana). Además estamos analizando si adherimos a la marcha que ese mismo día van a llevar a cabo los estudiantes del (colegio) Mariano Moreno”.

Informe: Ailín Bullentini.